No se demore en llamar por ayuda.
No haga nada para lo cual no haya sido entrenado, y no esté seguro de si es apropiado.
Permanezca calmado.
Verifique primero si la víctima tiene una vía aérea abierta, si está respirando y si tiene latido del corazón.
Si no, una acción inmediata es necesaria antes de atender cualquier lesión.
Trate al paciente gentilmente, asegúrese a él o a ella de que la ayuda está en camino, manténgalo lo más tranquilo posible.
Informe al equipo de emergencia de Promed lo más que pueda sobre lo que sucedió, cuál fue la condición del paciente cuando usted lo vio primeramente, y lo que usted hizo. Anote los cambios.
Deje que el equipo de emergencia de Promed haga su trabajo y ayude a mantener a otras personas fuera de la vía.
No mueva al paciente innecesariamente.
No trate de remover un objeto que esté clavado en el cuerpo.
No le proporcione al paciente nada de comer o beber (nunca le de alcohol).
Al asistir a una víctima, siempre comience con la respiración.
Revise su boca para remover cualquier objeto que le pueda bloquear el paso del aire tal como cuerpo extraño, sangre o vómito.
Incline la cabeza hacia atrás y eleve la barbilla (mentón) para que la lengua, que a veces obstruye el paso del aire, también se eleve y mantenga la vía aérea permeable. Si sospecha lesión espinal, eleve solamente la barbilla sin inclinar la cabeza.
Acercamos nuestra cara a la cara de la víctima (mirando hacia su pecho) procurando ver si el pecho se eleva, oír o sentir la entrada y salida del aire.
Hasta aquí podemos determinar si realmente la víctima está respirando.
Si respira, coloque a la víctima en posición de salvamento.
Cierre los orificios nasales de la víctima con los dedos.
Tome una inspiración profunda, selle su boca con la boca de la víctima y ventile dos veces (respire dentro de su boca). Fuerte cuando sea un adulto, cada 5 segundos. Suave cuando sea un niño, cada 3 segundos.
Si no puedes hacer un sello efectivo de tu boca con la boca de la víctima, cierra su boca y respira por su nariz. Para un niño pequeño o recién nacido, respira por ambos a la vez: boca y nariz.
Si los soplos no hacen que el pecho suba, la vía respiratoria puede estar bloqueada. Reposicione la cabeza e intente soplos de nuevo. Si el pecho no sube, empiece RCP. Cuando abra la vía respiratoria para soplar, vea si hay algún objeto en la garganta y, si lo ve, remuévalo.
Las señales de circulación son: Pulso en el cuello, respiración, movimiento, piel de color normal y circulación.
Si hay señales de circulación, pero no de respiración, de un soplo cada 4 o 5 segundos. Chequee cada minuto las señales de circulación.
Si no hay señales de respiración inicie RCP.
Colóquese siempre dispositivos de seguridad (guantes o fundas plásticas).
Utilice vendajes estériles o tela limpia sobre la herida
Aplicar presión directa sobre la herida, esta detiene la mayoría de las hemorragias.
Un vendaje con cierta presión (sin detener la circulación) le permitirá tener las manos libres para realizar otra cosa.
Si la hemorragia continúa, use elevación para reducir la hemorragia. Combínalo con presión directa sobre la herida.
Si el vendaje ya colocado se llena de sangre, no lo remueva, coloque otro vendaje y continué ejerciendo presión
Nunca remueva un objeto clavado..
Si la hemorragia continua, active el sistema de emergencias y llame al 911.·
Presione un punto de presión para reducir el derrame de sangre. Los puntos son: braquial y femoral para miembros superiores e inferiores. Combine esto con la presión directa sobre la herida.
El uso de torniquete siempre será la última opción.